"Los entrenamientos han ido bastante bien, sobre todo este último día, ya que la pista tenía un agarre bastante bueno. Los tiempos empezaban a ser rápidos y hemos podido probar varias cosas, además de confirmar algunas sensaciones con el prototipo de 2015", comentó Márquez tras acabar junto a Dani Pedrosa su último día de entrenamientos en la pista checa, donde dio 41 vueltas con el modelo 2014 y otras cinco con el prototipo 2015.
Para el de Cervera, "globalmente", lo más importante de estos tres días es que ha podido rodar "con la moto nueva y obtenido sensaciones positivas". "Además, Honda también ha traído algunas piezas nuevas para la RC213V actual y hemos probado algo de electrónica y de frenos, y también configuraciones diferentes de las que utilizábamos hasta ahora", aseguró en declaraciones facilitadas por su equipo.
"Estamos contentos de cómo ha ido, porque al final he completado muchas vueltas y hemos obtenido mucha información. Ahora ya sí que podemos irnos de vacaciones, que nos las merecemos", sentenció el actual campeón del mundo de MotoGP.
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