El Zaragoza se adelantó por medio de Lafita, pero los blancos tiraron de oficio para darle la vuelta al marcador con goles de Kaká, Cristiano Ronaldo y Özil.
El Real Madrid arrancaba la segunda vuelta con la imagen dejada en la retina de todo el mundo de su espectacular partido en Barcelona. El Bernabéu recibió a los suyos con una ovación dejando claro que estaba orgulloso de lo que hicieron los jugadores el pasado miércoles en Copa. Pero tocaba centrarse en la Liga y a los de Mourinho les costó meterse. El rival permitía cierta relajación y eso fue negativo. Sólo cuando se vio por debajo en el marcador el Real Madrid tiró de coraje para remontar un partido que se había complicado. El líder solucionó el encuentro con tres destellos y a otra cosa. Los blancos comienzan la segunda vuelta con una victoria basada en el oficio y en la tremenda pegada de los Cristiano Ronaldo y compañía. Tres puntos básicos en la lucha por el campeonato de Liga, ya que no se puede fallar en este tipo de compromisos y los madridistas cumplieron con solvencia.