El duelo más atractivo de la jornada de sábado que dio comienzo a la Primera División decepcionó. Dos equipos llamados a pelear por Europa o inquietar a los colosos de la Liga, demostraron que los cambios en las plantillas aún tienen que amoldarse. Tanto unos como otros dejaron poco fútbol en la primera mitad, con los de Nuno Espirito Santo desaprovechando una clara ocasión de Piatti, que golpeó en los dos palos, y buscando a la contra el peligro de Alcácer y Rodrigo.
Sin embargo, dentro del orden y la falta de riesgo, el Sevilla fue quien terminó encontrando la espalda de la defensa rival. El conjunto de Emery se ayudó de la visión de Denis Suárez, quien vio el desmarque y éste cedió al ex del Almería Aleix Vidal, para adelantarse. Los locales siguieron mejor tras el descanso y casi fue cuando se quedaron con uno menos los valencianistas, por la roja directa a un Rodrigo de Paul recién salido, cuando comenzaron a jugar mejor los de Nuno.
El Sevilla regaló la pelota y el Valencia apretó y terminó encontrando petróleo en el último instante gracias al empate de Orbán. El Valencia celebró el empate con los puños en alto, aguantando con uno menos y quitándose parte del maleficio de sus visitas al Pizjuán, y saliendo airoso en un duelo que tendrá para siempre cariz de revancha tras la eliminación de los 'che' en las semifinales de la Europa League del año pasado.
en un encuentro donde lo más destacado llegó en los minutos finales con dos expulsiones locales, Duda y Antunes, y un gol anulado al guardameta visitante Iraizoz por una falta inexistente.
El conjunto de Javi Gracia se estrenó con victoria en el banquillo malagueño en La Rosaleda gracias a un solitario tanto de Luis Alberto al aprovecharse de su propio rechace en un penalti ante un Athletic más centrado en la vuelta del 'play-off' de 'Champions' ante el Nápoles y que solo buscó el empate en el tramo final.
El partido fue bastante igualado y el delantero paraguayo Roque Santa Cruz marcó la diferencia en la primera mitad provocando el penalti tras un grosero error de Gurpegui. En la segunda mitad, el Athletic dio un paso adelante, liderado por un participativo Muniain, a la vez que su rival se iba atrincherando en su portería con el paso de los minutos. Al Málaga se le iba a complicar, y mucho, el encuentro con dos expulsiones casi seguidas.
La primera fue para el experimentado portugués Duda, que llevaba poco sobre el césped, tras una agresión y la segunda para el también luso Antunes por una entrada a destiempo. Sin embargo, la polémica no acabaría ahí y Mateu Lahoz, en el tiempo de descuento, anuló un golazo de cabeza del guardameta Gorka Iraizoz, que había subido a rematar una falta lateral, por una falta que no existió. Por si fuera poco los de Aduriz reclamaron penalti a Aduriz de Kameni en la última jugada.
Con esta victoria, el nuevo proyecto malaguista de Javi Gracia comienza con muy buenas sensaciones, sobre todo en el sistema defensivo. Bien organizado, el conjunto andaluz aún le queda trabajo por delante para hacer funcionar las nuevas piezas. El Athletic por su parte tendrá que olvidar derrota y polémica para hacerse fuerte en San Mamés y volver a la máxima competición europea 16 años después.
Además, el Granada de Joaquín Caparrós remontó (2-1) al Deportivo de la Coruña en Los Cármenes. Cavaleiro adelantó a los visitantes a los 20 minutos con un disparo que contó con la colaboración del meta rival Dimitrievsk. No fue hasta la segunda mitad cuando el meta deportivista, Germán Lux, devolvió el favor y permitió el tanto de Rochina desde fuera del área. El gol de la victoria para los locales lo firmó Babín rematando una falta bien botada por Fran Rico.
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