El portugués fue presentado este lunes en Stamford Bridge en medio de una enorme expectación mediática. "Si tuviera que elegir un apodo para este periodo, elegiría 'Happy One'. Estoy muy feliz", señaló Mourinho en la rueda de prensa.
El técnico luso, que finalizó su primera etapa en el Chelsea en 2007, resaltó que "el tiempo vuela". "Parece que solo han pasado un par de días, pero hace nueve años que llegué a este club. Tengo la misma naturaleza, soy la misma persona", reivindicó.
Respecto a este primer paso por el Chelsea, quiso aclarar que no fue "despedido" por Roman Abramovich. "No es cierto. Mucha gente no se lo cree, pero fue de mutuo acuerdo. En aquel momento pensábamos que era lo mejor para las dos partes, para mí y para el club. Por supuesto que fue un momento triste, pero no lamento aquella decisión", rememoró.
Mourinho repitió en varias ocasiones la "felicidad" que siente por desembarcar en el club inglés tras una convulsa etapa en el Real Madrid. "Es la primera vez que llegó a un club que ya amaba. Antes tenía que construir una relación emocional y solo quería al club un poco más tarde", explicó.
El preparador ha firmado por cuatro años con el Chelsea y, a este respecto, aseguró que siente "preparado" para una etapa larga en su nuevo club. "Antes no estaba. Espero cumplir hasta el último día de mi contrato. Si el club quiere que siga, sería más que feliz", reiteró.
Respecto a un posible descenso en la presión que puede sentir tras su paso por el Real Madrid, Mourinho dejó claro que no ve las cosas así. "Retorno a un lugar donde fui feliz y exitoso y los aficionados me quieren. Vengo con la perspectiva totalmente opuesta. Tengo más responsabilidad por eso. Las expectativas son altas porque la gente sabe lo que puedo conseguir", concluyó.
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