El compañero de equipo de Vettel, el australiano Mark Webber, que había salido desde la primera posición, terminó 7,1 segundos por detrás del líder, con el francés Romain Grosjean ocupando la tercera plaza con su Lotus en una soleada tarde en el circuito propiedad de Honda.
"Ichiban (primero), Ichiban", gritó Vettel en japonés por la radio del equipo, saltando de alegría después de pasar la bandera de cuadros de una carrera que tuvo su clave en la capacidad de Vettel de hacer dos parados, por tres de Webber.
"Gran trabajo, muchas gracias por relanzar el coche, increíble. Sois el mejor equipo del mundo. Muchas gracias chicos. Os quiero". Esta fue la quinta victoria consecutiva de Vettel, la novena en 15 carreras esta temporada y la número 35 de su carrera.
Preguntado en el podio sobre el campeonato, con el rugido apasionado del público de fondo, añadió: "Obviamente tenemos una muy buena ventaja, pero todavía hay que seguir empujando... Tiene muy buena pinta ahora mismo pero no se ha acabado todavía". Alonso, quien se convirtió en máximo anotador de puntos de la F-1 de todos los tiempos, no se hacía ilusiones sobre sus opciones.
"Incluso si Vettel no termina todas las carreras, necesito ganar casi todas, así que es cuestión de tiempo", dijo el piloto español.
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