El técnico portugués ha afirmado ahora que la Supercopa sí era importante por tratarse de "jugar contra el Barcelona".
José Mourinho ha asegurado en una entrevista a Real Madrid Televisión que cuanto más conoce al Real Madrid ve "más madridistas disfrazados", e insistió en su visión de señorío, como "morir en el campo", frente al de "personas" que "no están ya", de las que dijo que "han vendido un concepto equivocado". Mourinho afirmó que siente que "el madridismo" le quiere y que no aceptará los comentarios negativos en el plano personal. "Cuanto más conozco al Real Madrid, más me parece que hay madridistas disfrazados. Hay gente que dice ser madridista, pero de ello tienen poco. Pero el madridista de calle, estadio, bufanda, que me encuentro, siento que tienen confianza en mí y que me valoran", manifestó. "He aprendido a no valorar y a no responder, a no dar a la gente que me critica estratégicamente la importancia que no tiene, la gente busca protagonismo... Las críticas que me hacen deportivamente y que tienen razón de ser son absolutamente aceptables.
Cuando se entra en el campo de la ofensa he decidido que basta y que nos encontramos en tribunales o en juicio", agregó. La Supercopa sí es importante El técnico madridista hizo balance de lo que va de temporada y aseguró que después de "los problemas" del principio de la competición de Liga, el equipo está "en la dirección" que quiere. "Siempre he dicho que la Supercopa era la competición menos importante pero al ser contra el Barça tiene un significado diferente, en Champions la situación es inmejorable, el partido contra el City fue muy especial", dijo. "En Liga, después de todos los problemas no me ha gustado mi equipo en el trabajo inicial y luego entramos en período de crecimiento y estabilidad, crecimiento psicológico y este equipo ha demostrado que si psicológicamente esta tope, calidad técnica tiene mucha", añadió. Para el portugués, la crítica es parte de su carrera y asegura que se ha acostumbrado a convivir con ella siempre que mantenga los límites del respeto. "Como entrenador, prefiero que me critiquen por haber demostrado alguna agresividad en mis declaraciones, por buscar el orgullo escondido que tenían los jugadores y recuperar esas características que el equipo ha tenido siempre, a ser políticamente correcto y simpático con la gente y a ir en una dirección que el Real Madrid no puede estar",manifestó. Mourinho también habló del partido contra el Barça (2-2), y sobre los dos nuevos fichajes, el croata Luka Modric y el ghanés Michael Essien. "Para mí, de ese partido era fundamental, más que venir a 5 o a 11 puntos, cómo jugaba el equipo, en este momento de reconstrucción mental. Me fui contento con el juego, pero el empate no es el típico empate que vienes contento porque pudimos ganar el partido", dijo. "Espero que dejen tranquilo a Luka, es muy joven tiene que crecer dentro del equipo, es un jugador fantástico. El Bernabéu ya ha tenido un olorcito fantástico de lo bueno que es. Michael ha sido jugador mío y es más fácil para él entrar en el equipo", agregó. Después del partido contra el Manchester City, el portugués dijo que "el señorío es morir en el campo", declaraciones de las que también habló en la entrevista asegurando que gente que se marchó del club dejó un legado del señorío que él no conoce. "Algunas personas, muchas no están ya, han vendido un concepto de señorío equivocado, para mí el señorío es que un jugador debe morir en el campo, los jugadores llegaron muy cansados al final y eso para mi debe ser así", concluyó.
Fuente:Libertad Digital
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